La luna caminaba sobre el mar
enamorando con tintas rojizas al brillante sol.
Neruda, Benedetti e incluso un desconocido
escribieron la historia en las nubes, a los pies de los arboles
y en las semillas que algun día cantaran.
Por siglos....
Los besos fluyen invisibles entre la dama plateada
y el caballero dorado.
Por milenios...
han sido testigos de amor y odio
de eclipses de sentimientos.
Podria cantar en el ultimo escalon del cielo
como madrugada en tu ventana, como el paso del rocio en el infierno.
y en el manto de lo acontecido
miércoles, 21 de diciembre de 2011
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